El Tour se vuelve loco


Un desafortunado incidente de carrera sumió en el caos la 12ª etapa del Tour de Francia (178 km), la gran jornada del Mont Ventoux reducida por meteorología desfavorable a los 10 km de ascensión hasta el Chalet Reynard. El día en el que Nairo Quintana (Movistar Team) probó sus primeros ataques de consideración en carrera y sufrió después ante el ritmo de Froome (SKY), Porte (BMC) y Mollema (TFS) en el tramo final de carrera -aliviado por la ayuda de un sensacional Alejandro Valverde- quedó completamente ensombrecido por un lamentable acontecimiento.

En el último kilómetro, un montón provocado por el ingente público en las cunetas y las motos de carrera taponó la carretera y provocó la colisión de los tres favoritos de cabeza, además de ralentizar al grupo perseguidor e incluso a los propios Quintana y Valverde. Mientras los dos azules y el resto de los competidores salvaban el trance como podían, Froome avanzaba sin bicicleta durante un centenar de metros hasta tomar una bici de repuesto y cruzar después la meta nuevamente con la suya. Lo hacía a casi dos minutos de Mollema; a minuto y medio de Yates (OBE), Nairo y 'Bala'; y muy por detrás del propio Porte.

Tras una primera general sobre trasponder, con Yates de amarillo y Nairo Quintana, 3º a 14", la organización reordenaba en segunda instancia los tiempos y otorgaba a Froome, Mollema y Porte el tiempo del neerlandés, lo que dejaba a Froome como líder; Nairo, 4º a 1'01"; y Alejandro Valverde, 6º a 1'39". Finalmente, una segunda rectificación otorgaba siete segundos de compensación por el tapón a Quintana y Valverde, lo que les sitúa como tercero -Nairo, a 54"- y sexto de la general -'Bala', a 1'32"-. La general seguirá reordenándose mañana con la importante CRI de Vallon-Pont-d'Arc: 37,5 km con dos repechos y terreno sinuoso.

DECLARACIONES:
Nairo Quintana: "Hemos visto muchos desastres en el día de hoy. Hemos llegado delante de Froome y Porte después de ese percance que tuvieron y aparentemente no perdimos mucho tiempo frente a ellos, los rivales más importantes. Para mí fue muy apresurado atacar desde allí: había mucho viento de cara, fui neutralizado y me dejé balas que al final me hicieron falta. Día muy duro, con mucho viento todo el día, mucha potencia y llegamos muy justos al tramo final.

Cuando he llegado estaban ya caídos Mollema, Porte y Froome. Pienso que la mala organización, entre las motos y los espectadores, tienen la culpa de todo. Son circunstancias de carrera, pero debemos mejorar todos. Para mí está bien donde estoy; son pocos segundos para dónde y cómo estaba Froome hace unos días. Espero poder defenderme mañana bien en la contrarreloj".

Fuente: Movistar Team

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