Desgaste extra antes de la batalla final en Pirineos

La etapa de hoy era una de esas que los ciclistas catalanes que conocían la zona la marcaban como una etapa realmente dura y de desgaste. Eso se podía ver en el libro de ruta, 169 km de constante sube y baja por carretera secundarias y costera que harían, y han hecho, mucho daño a los ciclistas.

Ha sido una etapa donde desde un comienzo había muchas posibilidades que una escapada llegase a meta. Por ello se ha volado en las dos primeros horas para intentar formar la escapada buena del día. Se ha abierta toda una batalla por saber que ciclistas y equipos se iban a jugar la victoria de etapa en las calles de Castelldefels.

Al poco tiempo de formase la escapa buena empezaba el puerto más duro de la jornada, todo un primera, el Rat Penat, corto pero con tramos con mucha pendiente. Luego muchos tramos de esos pestosos con subidas y bajadas, muy complicadas para un pelotón. Por detrás equipos como el FDJ, Cannondale y al final Omega Pharma QuickStep han intentado coger a la escapada para intentar llegar al sprint en Castelldefels, pero ha sido inútil. El terrera era muy difícil para la caza y la ventaja de los de adelante era lo suficientemente grande como para cogerles antes.

Al final la etapa se la ha llevado el ciclista más joven, más ligero, más inexperto pero el más listo. Uno de esos ataques blanditos pero lanzados en el sitio y momento perfecto. Warren Barguil se ha "robado" la etapa de ciclistas de renombre como Egoi Martinez, Michele Scarponi o Rinaldo Nocentini entre otros.

El pelotón ha llegado por detrás a pocos minutos y con las caras caritas marcadas como quiriendo decir ¡Vaya día que nos hemos pegado! ¡No hemos parado! Tal vez excesivo desgaste en una etapa justo antes del duelo final en los Pirineos donde se decidirá lo más seguro esta edición de la Vuelta a España. Tres etapas pineraicas con sus correspondientes finales en alto, pero con alto más en su interior. Ya no serán las etapas que hemos vivido con solo una ascensión al final de la etapa. Serán etapas, largas, con varios puertos de entidad. Etapas de alta montaña de desgaste, mucho desgaste. Perfectas para ciclistas curtidos en mil batallas donde tener equipo será vital. Un mal día te hace perder la Vuelta. Habrá que tener cuidado con gente como Ivan Basso y Vincenzo Nibali que se las sabe todas en este tipo de etapas. Me da la impresión que gente como Valverde o Purito van a pagar en estos tres días todos los esfuerzos realizados en el Tour de Francia y se pueden ir hacía detrás en la general.