Niki Terpstra, el más listo de la clase


Tras el paso de las horas llega el momento de la reflexión y análisis de lo ocurrido ayer en la París Roubaix, la Clásica en mayúsculas, el Infierno del Norte, que dejó a muchos fríos al ver un final poco esperado y sin la emoción de ver pelear cara a cara a los grandes favoritos.

Vaya por delante mi admiración ante esta carrera y ciclistas que participan en ella. Pero sin embargo lo que no se puede negar es que la Roubaix 2014 fue especial por varios motivos. Ya no es raro ver una Roubaix en seco donde el polvo ha pasado a ser el protagonista en contra del barro de años atrás. También no deja de ser insólito que el paso por Arenberg no deje ningún gran favorito fuera de juego o bien por caída o problemas mecánicos. Algo que también resultó realmente raro es que tras el último paso por pavé duro de verdad (Carrefour de l'Arbre) se formase un grupo de hasta 11 ciclistas que se tendrían que jugar la victoria entre ellos. En mis esplendorosos 32 años no recuerdo ningún final así. Siempre en anteriores tramos de pavé y en particular en el Carrefour de l'Arbre se desataba una orgía de velocidad y acelerones que hacían partirse el grupo de favoritos en mil pedazos. Sin embargo este año solo se pudo ver a un Sagan, que con más corazón que fuerzas, se marchó por delante pero sin la explosividad que requiere este tramo decisivo.

Otro hecho importante a destacar va un poco relacionado con todo esto. Buen clima, ningún percance y mucha gente por delante ha hecho de esta edición de la Roubaix la más rápida de su historia con un tiempo de 6:09:01.

Es tiempo ahora de analizar y valorar las actuaciones de los principales protagonistas de esta edición.

John Degenkolb

Se podría decir que esta edición tiene dos ganadores, Niki Terpstra porque logró entrar en primera posició, y el joven sprinter alemán porque al entrar segundo y verse tan bien en este terreno supo al instante que tenía una Roubaix en sus piernas. Degenkolb no es un sprinter al uso como puedan ser los explosivos Marcel Kittel o Andre Greipel. Es un ciclista con una gran capacidad de sufrimiento y puede pasar cotas de montaña y tramos complicados de pavé. Ya se le vieron maneras el año pasado en algunas carreras en Italia y este año ha quedado demostrado que John Degenkolb puede pelear desde ya por grandes clásicas como Flandes y Roubaix.

Fabian Cancellara

Su cara al cruzar la línea de meta en el velódromo de Roubaix lo decía todo. Un gran ciclista y campeón como él tiene que pelear siempre por ganar y más cuando ya tiene 3 adoquines en su casa. Un tercer puesto aunque sea algo histórico e importantísimo a futuro, le dejó un mal sabor de boca porque posiblemente era el ciclista más fuerte de todos pero hay carreras donde ser el más fuerte no lo es todo. Se demostró ayer en Roubaix donde corrió en todo momento a la contra. Respondiendo a ataques o acelerando para cazar. Por cirscuntancias de carrera no se vió a Cancellara en ningún momento acelerando como solo él sabe hacerlo. Siempre a la sombra de Vanmarcke, Sagan o Boonen. Tal vez esa ausencia de ataques en cabeza de Cancellara dejará un grupo tan grande al final y fuese muy difícil controlar la carrera. De todo esto se aprovechó perfectamente Niki Tersptra que siendo el más listo de la clase le "robó" una Roubaix al bueno de Fabian.

Sep Vanmarcke

Tanto él como todo el Belkin tuvieron una gran actuación estando siempre en cabeza. Muy presentes en carrera demostraron que este equipo tiene ganas de Roubaix y que tiene sobre todo materia prima en las piernas de este joven pero ya experimiento especialista en pavé de nombre Sep. Se le pudo ver atacando en varios tramos y muy delante, sin complejos, pero al final la situación de la carrera le privó de su gran duelo junto con Cancellara y Boonen, los tres grandes favoritos iniciales. Sin lugar a dudas será unos de los grandes favoritos en estos próximos años y es que se ha convertido en pocos años en especialista y amante del pavé de Roubaix.

Zdenek Stybar

Siendo uno de los grandes crossbikers del mundo está demostrando que su entrada en la carretera y más en este tipo de carreras con pavé son su terreno. Ayer a la sombra de Tom Boonen se le pudo ver muy bien y sobre todo cerca de los mejores. En los momentos decisivos cuando Boonen ya no tenía fuerzas para estar delante cogió su relevo y estuvo delante con opciones de todo. El pavé es su terreno y cada año lo preparará más a conciencia.

Peter Sagan

Ayer Sagan corrió a la campeón, atacando y siendo agresivo. Lo que le pasó es que al final se quedó sin fuerzas y corrió más con el corazón que con piernas. Se le vió al final del tramo del Carrefour de l'Arbre que perdía algo de contacto. Aún así se demostró que tiene ganas de Roubaix y que en año venideros estará peleando. También seguro que vivió en sus propias carnes que el paso por estos tramos de pavé son muy diferentes a los del Flandes. No por el propio pavé sino por la velocidad por la que se pasa por ellos. En Flandes son cotas duras que se pasan a "poca" velocidad. En Roubaix  sin embargo se pasan a todo gas, a 40km/h o incluso más y eso es mucho desgaste y dureza extra.

Geraint Thomas

Gran actuación del joven británico que al igual que Wiggins está enamorado de la París Roubaix. Se le vió muy bien en carrera y es que el pavé le gusta a Geraint tanto como su gran especialidad, la pista. Estuvo en la escapada del día y luego tirando del grupo en favor de su líder Wiggins. Al final llegó muy justito de fuerzas pero demostró muy buenas maneras en esta carrera. Sobresaliente para él.

Sebastian Langeveld

Corriendo siempre escondido entre el pelotón no se dejó ver casi nada, sin embargo entró junto a los importantes. Otro especialista en pavé que estuvo delante, más por inercia que por otra cosa. Me dejó frío, ni se quedaba ni atacaba, simplemente estaba en la retaguardia a la espera de noticias que nunca llegaron. Se esperaba más de él.

Bradley Wiggins

Junto con Terpstra y Degenkolb el gran triunfador de esta edición. No por el resultado en sí, sino por la sensación que dio todo el día metido en carrera. Mucha gente pensaba que vendría a Roubaix a ver que pasaba. Pero "Wiggo" cuando quiere una carrera de verdad lo hace a conciencia. Lo hizo con el Tour y ahora parece que este repentino amor por Roubaix ha hecho de esta carrera su gran objetivo ciclista. Estuvo siempre en las primeras posiciones del grupo principal y si bien no tenía la fuerza de los grandes "cappos" se vió a un Bradley en muy buena forma y con muchas ganas de hacer bien. Yo no apostaba por él en este tipo de carreras pero año a año me sorprende este gran ciclista tan especial.

Tom Boonen

La verdad es que no le salió la carrera esperada a Tom pero para mi tuvo un sobresaliente claro en Roubaix. Tal vez sabía que no estaba para pelear cuerpo a cuerpo con Cancellara o Vanmarke, y por eso se la jugó a saltar antes del pelotón e intentar sorprenderles. Estuvo siempre con muchas ganas, atacando y dejándose ver en todo momento. Cuando fue cogido por el pelotón supo que no ganaría la París Roubaix y "lanzo" a su gregario Niki Terpstra por delante. Gregario que dentro de poco será jefe de filas, si no lo es ya. Cuando un ciclista como Boonen lo da todo solo se puede estar contento.

Bert de Backer

Fue una de las gratas sorpresas de la Roubaix. Este joven ciclista especialista en este tipo de carreras estuvo escapado en el corte principal con la intención de ver hasta donde llegaba pero sobre todo con un ojo puesto en su líder John Degenkolb. Se le vió con fuerzas pasando los tramos de pavé con muy buenas maneras. En el tramo final tuvo que trabajar en favor de su líder y le faltaron fuerzas pero sin embargo su aparición fue de lo más destacado de esta edición tan "rara".

Niki Terpstra

Una vez analizados los demás toca el turno al gran protagonista del día. Estuvo corriendo a la sombra de Tom Boonen, mientras él estaba escapado Niki estaba metidito en los bolsillos de Cancellara, sin hacer gastos extras. Al final se vió que no tenía las fuerzas de los más grandes pero supo sufrir en el último tramo y enlazó con el primer grupo. Esto le valió para poder jugarse la carrera. Al final se volvío a demostrar que esto del ciclismo no es solo piernas y fuerzas, sino cabeza y estrategia en carrera. Un ataque aparentemente normalito pero perfectamente realizado en el momento ideal le hizo vencedor de una soñada París Roubaix. Justo al terminar el Carrefour de l'Arbre, cuando se reagruparon los grupos para formar el gran grupo de 11 todo el mundo estaba pendiente de ver quien estaba allí. Había varios corredores del Giant-Shimano y Sky pero todos ellos ya estaban castigados y pensó Niki "¿Saltarán los "cappos" a por mi? Si no saltan mi guerra será con De Backer y Thomas". Y así fue...saltó y los "cappos" se miraron unos a otros. Sagan muerto y sin gasolina, Wiggins que no era su guerra porque no era un asiduro de esas carreras, Cancellara que en un grupo tan numeroso no se notaba tan fuerte, Degenkolb que tenía a un compañero allí le puso a tirar junto con Geraint Thomas pero ambos venían de la escapada y km a km veían como Niki Terpstra aumentaba su ventaja más y más. Al final la falta de ambición y reacción de los grandes "cappos" hicieron ganador, muy merecido, a un Niki Terpstra que estaba emocionadísimo a su entrada en el velódromo de Roubaix. Su victoria más importante sin duda, su entrada en el Olimpo.

1 comentario:

  1. Lo de la más rápida de la historia, creo que está mal, no?
    En el vídeo cuando entra en el velódromo el tiempo que muestran las imágenes tiene que ser erróneo, pone 5h:38min, pero el tiempo oficial es de 6:09:01.
    Por ejemplo Tom Boonen en 2012 ganó con 5h:55, para los mismos km.

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