Barbero, nuevo líder en Castilla y León tras una etapa durísima

Carlos Barbero ha desplazado por el ‘puestómetro’ a su compañero en Caja Rural-Seguros RGA Pello Bilbao como líder de la Vuelta a Castilla y León, tras la disputa de la segunda etapa, de 189 kilómetros entre Guarda y Fuentes de Oñoro, y que resultó durísima por las malas condiciones climatológicas hasta el punto de ser necesaria una neutralización.
 
La victoria correspondió al ruso Sergei Shilov (Lokosphinx), por delante de Babero y Miguel Rubiano (Colombia), con un grupo de veinte ciclistas que llegaron en el mismo tiempo. Se da la circunstancia de que el ganador, como nos refiere el seleccionador Salvador Meliá, “es uno de los habituales en la selección rusa de pista. Con su equipo compite bastante en este tipo de pruebas y ojalá pudiéramos hacer nosotros lo mismo. Porque no es lo mismo llegar a la fase de preparación específica a un 50%, haciendo entrenado en carretera, que haber competido al más alto nivel con profesionales”.

Diego Rubio (Efapel) y Gari Bravo (Murias Taldea) fueron los protagonistas de la etapa, con una larga fuga que se iniciaba en el kilómetro 27, pero que se encontraron con las duras condiciones climatológicas en la ascensión al puerto de Torre, con una intensa nevada que obligó a una neutralización de una veintena de kilómetros.

En esos momentos habían saltado por detrás dos corredores peligrosos como David Belda (Burgos BH) y Francisco Mancebo (SkyDive Dubai), pero tras la neutralización el pelotón no les dejó hacer por lo que ambos se dejaron cazar. Posteriormente también sería atrapado Bravo, mientras que Rubio aguantaba hasta trece de la llegada.

Volviendo con la selección nacional, “casi todos los corredores se mantenían en el pelotón en el momento de la neutralización. Pero en esa situación, lo que me preocupaba era que se metieran rápido en los coches, que no tuvieran problemas. Luego la carrera ha sido otra, se ha ido muy deprisa, sobre todo en los últimos kilómetros en los que se pensaba en el sprint”, Cristian Rodríguez, en el puesto 54 a 1-31, era el mejor de los nuestros.

La tercera y última etapa se correrá desde Zamora al alto de Lubián, con 179 kilómetros, con un perfil bastante accidentado en la parte final con las ascensiones a Padornelo (segunda) y la meta final.

Fuente: RFEC

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