El Gran Premio Macario alcanza este año su mayoría de edad
El Gran Premio Macario alcanza este año su mayoría de edad, sus dieciocho ediciones, manteniendo su recorrido y su esencia, a pesar del cambio de organización desde el Club Ciclista Iplacea a la Federación Madrileña de Ciclismo, aunque el interés este año será mucho mayor, al ser el cierre de la Copa de España élite y sub23 2016 – pasando de sus fechas tradicionales de marzo a mayo-, con una decena larga de corredores aún con opciones matemáticas de llevarse el prestigioso circuito nacional.
La clásica madrileña nació el 14 de marzo de 1999, con un recorrido entre las instalaciones de Macario Llorente en el madrileño Polígono de Las Mercedes y Alcalá de Henares, sobre 162 kilómetros, que siempre se ha mantenido por la zona este y sureste de la Comunidad, con una ligera incursión en algunas ediciones en la provincia de Guadalajara. Un recorrido sin grandes ascensiones, de continuo rompepiernas que ha caracterizado a la carrera. Alfredo Sanz (PC Viejo) se imponía en solitario, con Pablo Trapiella (Fundación Valladolid) y Rubén Trenado (Ciclos Nico) en el podio. Como curiosidad diremos que el presidente del Jurado de aquella primera edición fue José Manuel Díaz Lorenzana, director técnico hoy de la prueba.
Ese mismo año nacía la Copa de España, con quince pruebas, de las que solamente cuatro permanecen en el calendario actual: Guerrita, Valenciaga, Legazpi y Torredonjimeno. Fue el único año que permanecieron separadas: en 2000 el GP Macario entraba ya en el calendario del circuito nacional, en una edición en la que Emilio López (Superfroiz) superaba a Antonio Martín (Café Baque) y Benjamín Noval (Galibier Tegui) en una llegada de cincuenta corredores.
Valverde, protagonista
Kelme-Costa Blanca sería el protagonista de la tercera edición, tanto en Alcalá de Henares, con doblete de Jordi Riera y Alejandro Valverde, como en la general final de la Copa de España, que se llevaban el ‘Bala’ y el equipo de la garra.El sevillano Javier Ramírez Abeja (Avila Rojas) y Pablo de Pedro (Cropusa) ofrecían un vibrante final en 2002, para mantener a raya a un pelotón al que terminarían superando por escasos segundos. Xavier Pérez (Puertas Artevi) se vestía de amarillo en Alcalá de Henares, aunque de forma efímera. Curiosamente Ramírez Abeja volvería a tener protagonismo un año más tarde, año en que llegó y salió como líder… ganando a la postre la Copa de España. Aquella quinta edición del Macario se saldó con el doblete del equipo Alcosto, con Luis Pérez y Jesús del Nero, en la que ha sido la última victoria madrileña.
La llegada del 2004 fue la más masiva de la historia de la clásica madrileña, con un sprint de 54 ciclistas, entre los que el argentino Lucas Haedo (León y Ayuntamientos) era el más rápido, por delante de José Joaquín Rojas (Wurth) y del mencionado Del Nero (CCM). Rodrigo García (Spiuk) llegaba en las primeras posiciones manteniendo un amarillo que al final terminaría siendo suyo.
Murcia fue la protagonista del VII GP Macario, con el triunfo de Pedro Luis Castillo (Murcia Turística) por delante de Eloy Teruel (Soctec), hoy más conocido por sus éxitos en pista, que se vestía de líder en Alcalá de Henares desbancado a otro especialista de los velódromos Unai Elorriaga (Alfus Tedes), aunque el protagonismo de ambos fue efímero. Fue la edición más larga de todas, con 170 kilómetros.
Cambio de salida
La octava edición supuso un cambio importante, al trasladarse la salida a las nuevas instalaciones de Macario Llorente en la calle Tales de Mileto en Alcalá de Henares, escenario que ha permanecido fiel desde entonces. El catalán Isaac Escolá, con los colores azulgranas del FC Barcelona, se llevaba la victoria al superar con facilidad a sus cuatro compañeros de fuga, con los madrileños del Fuenlabrada Iván Alberdi y Jorge Pérez en los otros dos cajones del podio. De amarillo se vestía un Fran Gutiérrez que comenzaba a cimentar su tercer triunfo en la Copa de España, algo que no le suponía especial ilusión.Superando a su compañero de fuga, Oscar Pujol (Aizpuru), Francisco Torrella (Comunidad Valenciana) se llevaba el Macario en 2007. Y aunque aquel día quien subía al podio era José Angel Rodríguez (CCM), el valenciano terminaría ganando aquella edición, con el castellano-manchego como mejor sub23. Fue una carrera extraña ya que quince corredores se escapaban antes del kilómetro 50 y ante la pasividad del pelotón culminaban su aventura, antes del salto final de los dos protagonistas del día.
Victoria en solitario
El hispano-suizo David Vitoria (UPV-Bancaja) se convertía en la edición del décimo aniversario en el segundo y último corredor en imponerse en solitario, demostrando su talla de rodador que no pudo exhibir en profesionales. Con 47” de ventaja superaba a un amplio grupo liderato por Angel Madrazo (Saunier Duval) y Antonio Olmo (Fuerteventura), entonces lejos de las primeras posiciones de una general que pasó a comandar un tal Rafael Valls (Comunidad Valenciana).La undécima edición tuvo como triunfador al vasco Egoitz García (ECP), en su despedida del campo amateur ya que pasaría a pro algunas fechas más tarde. Un grupo de 14 corredores se jugaba el triunfo, con Javier Martínez (Baqué) y Gonzalo Zambrano (Extremadura) en el podio de la Plaza de Cervantes y con Jorge Martín Montenegro de amarillo en una edición que dominó desde la segunda a la última prueba, y en la que el hispano-argentino se llevaría tres triunfos parciales.
Eduard Prades (Azysa-Cetya-Conor) se imponía en la siguiente edición, al ser el más rápido de un grupo de 16 unidades que se marchaba en Loranca, por delante de Enrique Sanz (Lizarte) y Raúl Alarcón (Guerola-Valencia Terra i Mar), ganador final de qla ue ese año pasaba a denominarse oficialmente Copa de España de ciclismo en ruta. El catalán, por cierto, se llevaría la Copa dos años más tarde.
Rusia arrasa
En 2011, la carrera cambió de nombre: Macariov. O al menos debió hacerlo ya que cuatro ciclistas del equipo ruso Lokomotiv llegaban destacados a la meta de la calle Libreros, con ligeras difrencias entre ellos, mientras que un quinto corredor de esta escuadra encabezaba un amplio pelotón, a 2-10 de los escapados, que fueron por este orden Eugeny Shalunov, Artur Ershov, Sergey Beiykh y Kirill Sveshnikov.El balear Juan Carlos Riutort (Mutua de Levante-Cafemax) era el vencedor del XIV Gran Premio Macario, en otra edición marcada por un sprint masivo, en esta ocasión de medio centenar de corredores –concretamente 52-, superando a Airán Fernández (Mopesa) y Mike Terpstra (Azysa), el hermano del pro Niki.
Un año más tarde, el Macario cambiaba su meta, desde el centro de la ciudad al Polígono La Garena, lo que no redundó precisamente en su imagen… por lo que en 2014 se retomó el tradicional final junto a la plaza de Cervantes. Más significativo era el cambio de recorrido, con la supresión del alto de los Santos de la Humosa, a una veintena de kilómetros de meta, aunque manteniendo el carácter rompepiernas. Por lo demás, Fernando Grijalba e Ibai Salas daban el doblete a Caja Rural-Seguros RGA, en una llegada de una veintena de corredores destacados. Con ese triunfo, el vallisoletano se vestía de amarillo como preámbulo de su triunfo final en la Copa de España.
Pérez y Zhuralev, tanto monta…
El abulense Nacho Pérez (Gomur-Cantabria) fue el vencedor de la edición del ‘regreso’, al superar a cuatro compañeros de fuga -Alain González (Guipúzcoa-Eki), Artem Samolenkov (Lokosphynx) y Héctor Saéz (Caja Rural), con Alberto Gallego (Bicicletas Rodríguez-Extremadura) levemente descolgado-, en una edición marcada porque el corredor que debía vestirse de líder, el ruso Vadim Zhuralev (Lokosphynx), no subió al podio por un error en el cómputo de la general. Para los amantes de las anécdotas, quien recogió el amarillo fue el que sería vencedor final, Unai Intziarte, entonces en Gipuzkoa y hoy en las filas de Aldro Team.Zhuralev se tomaba la ‘revancha’ el año pasado, en otro recital ruso, culminando una escapada desde el kilómetro 18 con su compañero Artem Samolenkov y el valiente Héctor Sáez (Caja Rural). Otro protagonista del 2014, Nacho Pérez, volvía a serlo: esta vez al acceder al liderato, aunque no llegaría a vestirlo en carrera, ya que pasaría a profesionales antes de la celebración de la siguiente prueba.
Y así llegamos a 2016: el próximo 15 de mayo escribiremos el último capítulo de una historia que tiene aún muchas más páginas por escribir.
Fotos: RFEC
Fuente: Prensa GP Macario - FMC
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