Una caída de Rúbén Fernández lleva la decepción a los sub23

Una caída de las que se pueden calificar de ‘tontas’ de Rubén Fernández frustró en gran medida las esperanzas de la selección española en la prueba sub23, en la que el murciano fue el mejor de los nuestros, pero en el puesto 65, a 8-06 del esloveno Matej Mohoric, ganador el año pasado como junior y éste como ‘espoir’.

Y es que ni siquiera se había entrado en el circuito de Fiesole cuando el murciano se iba al suelo, dándose un golpe en la zona lumbar, aunque realmente más que el dolor en la espalda le afectó en la mente.

El resto de la selección no se metió nunca en los primeros cortes, controlando bien en el pelotón, pero desaparecería progresivamente en las tres vueltas finales. Carlos Barbero y Mario González lograrían terminar, en los puestos 83 y 84, a 16 minutos, mientras que Mikel Iturria y Haritz Orbe abandonaban.

En cuanto a los protagonistas de la prueba, destacar buna gran labor de la selección francesa, que jugó sus bazas con bastante astucia, aunque a la hora de la verdad no pudo consolidar la ventaja de Julian Alaphilippe cuando iba escapado, siendo cazado y rebasado por un sensacional Mohoric que daría la última vuelta en solitario para coronarse como doble vencedor, enganchando título junior y sub23, algo que nunca había sucedido.

El arranque desde atrás del sudafricano Louis Meintjes no sirvió para atraparle por apenas tres segundos, pero sí para darle la plata, mientras que en la lucha por el bronce, con un grupo de 17 unidades, el noruego Sondre Holst Enger superaba al australiano Caleb Ewan.

Fuente: RFEC

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